10 consejos si es el primer verano de tu perro

El primer verano de un perro es una experiencia llena de descubrimientos, olores nuevos y momentos inolvidables. Pero también puede suponer un reto, especialmente si es un cachorro o acaba de unirse a tu familia. Las altas temperaturas, la exposición al sol, los cambios de rutina y las actividades al aire libre requieren ciertos cuidados específicos para garantizar su bienestar.

En este artículo, desde La Casa de Turrón, hemos preparado una guía con 10 consejos clave para ayudarte a que su primer verano sea feliz, seguro y cómodo. Tanto si es un cachorro como si es un perro adulto recién adoptado, estos tips te ayudarán a disfrutar al máximo de esta estación juntos.

1. Respeta su ritmo y su necesidad de descanso

Durante el verano, es normal que tu perro esté más somnoliento, sobre todo si es cachorro. El calor puede aumentar su sensación de fatiga, así que es importante no sobreestimularlo ni forzarlo a hacer ejercicio cuando no le apetece. Deja que marque su ritmo, y si duerme más de lo habitual, no te preocupes: es totalmente normal.

2. Haz una introducción progresiva a las altas temperaturas

Si tu perro ha nacido en invierno o primavera, probablemente no haya experimentado temperaturas elevadas. Por eso, es importante no exponerlo de golpe al calor más fuerte. Realiza salidas más largas en las horas más frescas y acostúmbralo poco a poco al entorno exterior, al sol y a los diferentes tipos de suelo.

3. Evita paseos en horas de máximo calor

Los paseos deben hacerse preferentemente a primera hora de la mañana y al atardecer. El asfalto puede alcanzar temperaturas muy elevadas y provocar quemaduras en sus almohadillas, como siempre decimos, piensa si tu pisarías el asfalto descalzo. Como regla general, si no puedes mantener tu mano sobre el suelo durante 5 segundos sin quemarte, tampoco debería pisarlo tu perro.

4. Hidratación constante: más importante que nunca

Tu perro siempre debe tener acceso a agua limpia y fresca. En verano, su necesidad de hidratación aumenta considerablemente, especialmente si es muy activo o de pelo largo. Coloca varios cuencos de agua en casa, cambia el agua varias veces al día y lleva siempre una botella contigo cuando salgáis a pasear o un cuenco portátil, ubica previamente si tienes alguna fuente cerca en el paseo.

5. Cuidado con el golpe de calor

El golpe de calor es uno de los mayores peligros en verano. Aprende a reconocer sus síntomas: jadeo excesivo, debilidad, vómitos, encías muy rojas o incluso desorientación. Si sospechas que tu perro puede estar sufriéndolo, trasládalo a una zona fresca, humedece sus almohadillas y orejas con agua y contacta rápidamente con tu veterinario.

6. Bajo ningún concepto lo dejes solo en el coche

Incluso con las ventanillas entreabiertas, la temperatura dentro de un coche puede dispararse en cuestión de minutos. Dejar a un perro solo en un vehículo cerrado durante el verano puede ser fatal. Si tienes que hacer recados, es mejor dejarlo en casa. 

Antes de subir al coche, trata de ventilarlo o poner el aire acondicionado.

7. Protégele del sol y crea zonas de sombra

Los perros, especialmente los de pelaje claro o piel rosada, pueden sufrir quemaduras solares. Si va a pasar tiempo al aire libre, asegúrate de que tenga acceso a una zona con sombra. Existen también cremas solares específicas para perros que pueden aplicarse en zonas sensibles como la nariz, las orejas o el abdomen.

8. Introduce poco a poco actividades acuáticas

Si quieres que tu perro disfrute de juegos de agua, piscinas o incluso del mar, hazlo de forma progresiva. Algunos perros aman el agua desde el primer día, pero otros necesitan tiempo. Utiliza juguetes flotantes, hazlo divertido y nunca lo fuerces. Además, sécalo bien después para evitar problemas de piel.

En casa, intenta entretenerlo con actividades refrescantes, como un bol con agua y fruta flotando, el tapete para lamer congelado o helados caseros con fruta y yogur.

9. Cuida su alimentación en los días calurosos

Con el calor, es habitual que el apetito disminuya. No te alarmes si come un poco menos. Puedes ofrecer la comida en las horas más frescas del día y complementar su dieta con snacks refrescantes como cubitos de fruta congelada (evitando las que son tóxicas). También puedes mojar el pienso con caldo natural frío para hacerlo más apetecible.

10. Adapta su espacio de descanso

Revisa dónde duerme o descansa tu perro. Asegúrate de que su cama no esté cerca de ventanas soleadas o zonas mal ventiladas. Puedes ofrecerle una esterilla refrescante o una alfombrilla húmeda en los días más calurosos. Lo importante es que tenga un lugar cómodo, ventilado y alejado del calor directo.

Conclusión

El primer verano de tu perro puede ser una experiencia maravillosa si tomas algunas precauciones básicas. Estar atento a su hidratación, evitar las horas de calor, crear espacios seguros y actuar con sentido común son claves para que disfrute del verano con salud y bienestar.

En La Casa de Turrón, sabemos que cada perro es único y que acompañarle desde sus primeros pasos es un privilegio. Por eso, diseñamos productos cómodos, resistentes y bonitos, pensados para cuidarlo en todas las estaciones del año. Si este verano quieres lo mejor para tu compañero peludo, descubre nuestra colección de arneses, comederos, accesorios y consejos en nuestro blog y tienda online.